LA REACCIÓN COMO PRINCIPIO DE ACTUACIÓN: “Actuar es reaccionar como se puede a las circunstancias imaginarias” (Yoska Lázaro)

Esta claro que hay razón en el principio de actuación que pone el eje en la acción. Diría que es casi indiscutible, pero lo cierto es que es discutible. Aunque solo sea por matices, es discutible y eso me gusta. Quienes han trabajado conmigo ya sea como actor en una obra o actor que esta formándose, sabe que para mí es muy importante que el actor piense qué dice y qué hace. Siempre en un estadío previo, nunca en escena. Me encuentro con muchos actores que se consideran “intuitivos” y si bien en parte lo son, en otra gran parte desconocen qué hacen. ¿Y eso no es válido? ¡Por supuesto que lo es! Todo depende también de qué se proponga el actor. Qué tipo de actor se proponga ser.

Yo considero y reformulo el principio de actuación de Sandy “Vivir realmente bajo circunstancias imaginarias” y el de William Esper “Hacer realmente bajo circunstancias imaginarias”, comenzando para una buena actuación con el principio de “Reacción”.

También consideramos pedagógicamente poco apropiado el término “realmente” en la formulación de ambos porque creo que pone al actor, cuando le pido que actúe “realmente”, en un cálculo rápido de lo que está esperando ver el espectador por “real”. Eso deja de lado su honestidad en el pensamiento de lo correcto para la mirada del espectador. Yo elijo en su lugar, usar la fórmula “Como puedo“. Este “Como puedo” hace que el actor acepte su singularidad y no se cuestione la forma correcta porque sabe que esa forma correcta, es la que él puede obtener en ese momento y no otra. El concepto de realidad me parece que es encorsetador del hacer del actor. Entiendo a qué refiere, por supuesto, pero la escuela, mi escuela, entiende que elconceptos o los conceptos debe ser funcional a mi pedagogía y las herramientas que le brindo al actor.

Las palabras con las que enmarcamos una visión técnica puede confundir al actor si no es precisa y coherente con la formulación de la propuesta técnica y su manifestación escénica. Debe dar claridad técnica en su formulación. Por ello es que creo en “Reaccionar como puedo a las circunstancias imaginarias” (React as you can to imaginary circumstances). Esta formulación le saca presión al actor y le brinda libertad y singularidad pues entiende que no tiene que hacer nada que sea esperado o más correcto que hacerlo tal y como en su aquí y ahora.

La acción dramática es una reacción. Nosotros somos fruto de una reacción. Biológicamente es así. Nuestra distribución en un aula es fruto de una reacción. La docente está en un lugar y el alumnado en otro. Claramente es por convención social, pero si entrar a un lugar y ven a alguien sentado mirando a un pizarrón y usted es el docente, ocupara el espacio frontal de la mirada del alumno. Nuestra forma de hablar es también una reacción. Reaccionamos a nuestro entorno, a la persona con la que hablamos, a nuestro rol, a cuanto conocemos a quien tenemos enfrente.